No era la primera vez que le sucedía...
Su cuerpo estaba marcado con cortes y marcas negras de pólvora, golpes y moretones, además de múltiples raspones y otras heridas. La sangre manchaba su ropa -una camisa negra con una playera blanca abajo, pantalones del mismo color y unas zaparillas de ambos- y su cabello como siempre estaba alvorotado. Mas se veía tranquilo, pues no era nada nuevo.
Se sentó a esperar con pasiencia, sintiendose algo mareado.
Su cuerpo estaba marcado con cortes y marcas negras de pólvora, golpes y moretones, además de múltiples raspones y otras heridas. La sangre manchaba su ropa -una camisa negra con una playera blanca abajo, pantalones del mismo color y unas zaparillas de ambos- y su cabello como siempre estaba alvorotado. Mas se veía tranquilo, pues no era nada nuevo.
Se sentó a esperar con pasiencia, sintiendose algo mareado.